Notarios piden que investigación sobre peruano Sergio del Castillo, desaparecido en Moscú, no se abandone.
- 02/10/2011
- Perú
Con la finalidad que la investigación referida a la desaparición en Moscú del ciudadano peruano Sergio Del Castillo Cebreros no se abandone y continúe en forma efectiva, el jueves 3 de febrero -en horas de la noche- el Notario Sergio Del Castillo, padre del joven diplomático, el Colegio de Notarios de Lima (CNL), encabezado por su Decano, Dr. Mario Romero Valdivieso, familiares y amigos asistieron a una vigilia frente a la sede de la embajada de la Federación Rusa en nuestro país.
La cita sirvió, también, para que los asistentes realicen un llamado al Gobierno Nacional, con el fin que efectúe las coordinaciones necesarias para que las autoridades rusas no cesen en su labor de investigación sobre el caso.
Como es de conocimiento público, el joven Sergio Del Castillo Cebreros (30) es un diplomático peruano que cumplía funciones en la embajada del Perú en la Federación Rusa desde el año 2009. Desapareció en el centro de Moscú, en las primeras horas del 1 de enero del presente, después de salir de una discoteca de la capital rusa, a la que asistió por las fiestas del Año Nuevo.
El Dr. Sergio del Castillo ha señalado que las investigaciones tienen que continuar, precisamente por ese motivo es que realizamos esta vigilia, para que no se abandone este caso. Sergio está vivo y hay que buscarlo.
De igual forma, el Dr. Mario Romero Valdivieso, Decano del Colegio de Notarios de Lima, precisó que la vigilia es una muestra de solidaridad de los Notarios y del público en general, que nos acompaña en esta ocasión, y es un llamado para lograr que las autoridades rusas continúen las investigaciones respectivas y no cesen en la búsqueda de nuestro compatriota.
Cabe mencionar que el Colegio de Notarios de Lima, al tomar conocimiento del hecho, cursó inmediatamente una comunicación a la Embajada de la Federación Rusa en el Perú y al Ministro de Relaciones Exteriores de nuestro país, con el fin que interpongan sus buenos oficios y se ubique el paradero de nuestro compatriota.